Gracias a las cucarachas!
Hacía rato que había sonado el despertador. Pero la fiaca fue más fuerte. No había nada más tentador que seguir en la camita. El timbre sonó dos veces. Sabía que la administración había pautado la fumigación para ese día. Bajé la escalera, me vestí con lo que encontré a la vez que gritaba “Ya vaaa”.
Abrí la puerta. Me sorprendí. El fumigador no era el señor Juvenal que cada vez que viene me cuenta las historias de sus nietos, sino un bombonazo ¿Sería el nieto más grande?
Mi pelo era un desastre, mi cara de dormida me delataba. Impresentable. El pasó y empezó por el baño, siguió por la cocina y después por cada lugar que le fui indicando.
Mientras mataba a mis mascotas involuntarias, charlábamos. Era alto, ojos café y una sonrisa que lo iluminaba... daban ganas de contarle un chiste a cada rato, solo por verlo reír.
_¿Sos de GEBA?, me dijo por la camisetita que cuelga del cordel de la cocina.
_No, de Gimnasia de La Plata, del Lobo... que porteño!, le dije
Y otra vez se río. También me preguntó por mi profesión y mi laburo.
_ Menos mal que viniste, me había quedado dormida
_ ¿Llegás tarde?
_No hay problema
Terminó su trabajo. Lo acompañé hasta la puerta y se fue. Suspiré, me encantó el fumigador. Pero lel sentido de la realidad volvió a mi. Me apuré a bañarme, cambiarme y salir rumbo al trabajo.
En el camino, mientras esperaba que cambie el semáforo para cruzar, vi que a mi lado había un chico: era él. Íbamos en el mismo sentido. Me recordé que las casualidades no existen y me obligué a no dejar pasar la oportunidad:
_Vos sos el fumigador
_ Y vos la periodista ( creo que es una de las pocas veces que no contradije a alguien con el tema).
Caminamos cuatro cuadras charlando, haciendo chistes y riendo. Me contó algunas de sus cosas. Tenía paso largo y apurado. Yo lo que menos tenía era apuro. Azcuénaga era la calle de la despedida. Llegamos. Me miró y con una sonrisa me dijo: “Hasta el mes que viene señorita”.
Abrí la puerta. Me sorprendí. El fumigador no era el señor Juvenal que cada vez que viene me cuenta las historias de sus nietos, sino un bombonazo ¿Sería el nieto más grande?
Mi pelo era un desastre, mi cara de dormida me delataba. Impresentable. El pasó y empezó por el baño, siguió por la cocina y después por cada lugar que le fui indicando.
Mientras mataba a mis mascotas involuntarias, charlábamos. Era alto, ojos café y una sonrisa que lo iluminaba... daban ganas de contarle un chiste a cada rato, solo por verlo reír.
_¿Sos de GEBA?, me dijo por la camisetita que cuelga del cordel de la cocina.
_No, de Gimnasia de La Plata, del Lobo... que porteño!, le dije
Y otra vez se río. También me preguntó por mi profesión y mi laburo.
_ Menos mal que viniste, me había quedado dormida
_ ¿Llegás tarde?
_No hay problema
Terminó su trabajo. Lo acompañé hasta la puerta y se fue. Suspiré, me encantó el fumigador. Pero lel sentido de la realidad volvió a mi. Me apuré a bañarme, cambiarme y salir rumbo al trabajo.
En el camino, mientras esperaba que cambie el semáforo para cruzar, vi que a mi lado había un chico: era él. Íbamos en el mismo sentido. Me recordé que las casualidades no existen y me obligué a no dejar pasar la oportunidad:
_Vos sos el fumigador
_ Y vos la periodista ( creo que es una de las pocas veces que no contradije a alguien con el tema).
Caminamos cuatro cuadras charlando, haciendo chistes y riendo. Me contó algunas de sus cosas. Tenía paso largo y apurado. Yo lo que menos tenía era apuro. Azcuénaga era la calle de la despedida. Llegamos. Me miró y con una sonrisa me dijo: “Hasta el mes que viene señorita”.
7 Comments:
jajajjaa !
y seguimos con otros ramos...
ay mujer! no aprendez mas, con los trapos de los triperos no vas a levantarte a este pibe, porque como vd. sabrá (platence en el exilio) los de ginmasia (o ginasia como se autollaman) no pueden ganar nada!
despues no digas que no te avise!
el proximo mes esperas al fumigador disfrazada de cucaracha y le decis q te mate echandote unos "polvos" asesinos jaja
bechos de folki
uy, hay que esperar un mes,porque no lo llamás urgente que hay una plaga en tu cocina ... total es una mentirita piadosa.
besos,
disfrazada de cucaracha y le decis q te mate echandote unos "polvos" asesinos .. jajajajjaa q animalll.... pero q buen estuvo!! ovacion de pie jajajja
nenaa... siempre te aparecen de la forma mas incierta e inesperada os hipoteticos y posibles candidatos a algo. Es como que lo habitual y gastado del hombre promedio no te es trascendente ya no?
te dejo un beso... te quiero nena... aunq no compartamos en muchas cosas como las perspectivas de esta sociedad q nos toca... cuidate
la idea de una inquilina particularmente grande puede funcionar... ^^ y al menos confirmas si lo queres ver dentro de un mes o no!
Saludos!
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